viernes, 27 de marzo de 2020


LA VIDA EN ESPAÑA EN EL SIGLO XIX

Hoy día, España es uno de los mayores constructores mundiales de trenes de alta velocidad, que se exportan a países como Japón. Sin embargo, los primeros trenes llegaron al país con décadas de retraso.




La vida en el siglo XIX

A lo largo del siglo XIX se produjeron transformaciones económicas y sociales en Europa que fueron más lentas en España. Aquí, el comercio creció poco, los transportes de vapor llegaron con retraso y la industrialización fue débil. El crecimiento se limitó a zonas como el País Vasco y Cataluña, y a grandes ciudades como Madrid.



La mayor parte de la población permaneció en el campo en condiciones de pobreza. También los obreros de las ciudades vivían en barriadas insalubres. Por el contrario, en las urbes se levantaron ensanches para la burguesía, con amplias calles, luz eléctrica y casas lujosas.





 Burguesía
Casa burguesa

Salón Burgués
Familia burguesa

Damas de la burguesía


Clase obrera

Calle obrera

Niños obreros

Barrio burgués y barrio obrero


Casa obrera

Diferencia de barrios en Sevilla (2019)


Las malas condiciones de vida y el analfabetismo de la mayor parte de la población preocuparon a algunos Gobiernos. Estos intentaron hacer leyes para regular el trabajo y obligar a la escolarización infantil. El fracaso de estas iniciativas provocó protestas de los obreros.




Escuela del siglo XIX

Maestro en la escuela y un torero. Imagen que muestra el dicho "Pasar más hambre que un maestro de escuela".
Movimiento de obrero


LA VIDA SOCIAL EN LA ESPAÑA DEL SIGLO XIX





La cultura del siglo XIX

A pesar de que la educación estaba limitada a un pequeño sector de la sociedad, en el siglo XIX se dio una importante evolución cultural. Podemos dividir la evolución literaria y artística en tres etapas.


Comienzos del siglo XIX

A comienzos del siglo destacó el pintor Francisco de Goya. Además de trabajar para los reyes, Goya realizó pinturas muy personales que criticaron los horrores de la guerra y la represión de Fernando VII.

Don Francisco de Goya y Lucientes



Mediados del siglo XIX

El romanticismo se centró en el ambiente revolucionario, la burguesía y las tradiciones populares. Algo más tarde, el realismo se interesó por la sociedad industrial, la realidad urbana y la dura vida obrera.


Escena de una venta (1855) Manuel Cabral Aguado



Finales del siglo XIX

Los impresionistas estudiaron la influencia de la luz en los paisajes y edificios. Estos parecían distintos con la luz de la mañana, de la tarde o eléctrica, o cuando estaban envueltos en el humo de las nuevas fábricas y transportes.



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